Composición
Cada comprimido ranurado contiene: Principio activo: 274,09 mg de clorhidrato de mefloquina racémico, equivalente a 250 mg de mefloquina base. Excipientes: poloxámero 3800, celulosa microcristalina, lactosa, almidón de maíz, crospovidona, alginato de calcio y amonio, talco y estearato de magnesio.
Presentación
Comprimidos (ranurados) de 250 mg x 8.
Indicaciones
Terapia y profilaxis de la malaria. Terapia:Lariam se indica para el tratamiento oral de la malaria, en particular cuando ésta ha sido provocada por cepas de P. falciparumresistente a otros antipalúdicos. También puede utilizarse para el tratamiento de cepas de P. vivaxy malaria combinada (ver Dosificación). Profilaxis:Se recomienda Lariam para quienes viajan a áreas palúdicas, en particular para quienes viajan a las áreas donde existe un alto riesgo de infección con cepas de P. falciparumresistente a otros antipalúdicos. Tratamiento en caso de emergencia:También se prescribe Lariam a quienes viajan como un medicamento de reserva, que deben tomar como una medida de emergencia en caso de que se sospeche la presencia de malaria y no se disponga de atención médica inmediata.
Dosificación
La mefloquina tiene un sabor amargo y levemente picante. Los comprimidos de Lariam deben deglutirse enteros, de preferencia, después de una comida, con al menos un vaso de líquido. En el caso de los niños u otras personas que tengan dificultades para tomarlos enteros, también se los puede triturar y formar una suspensión en un poco de agua, leche u otra bebida. Tratamiento curativo:La dosis terapéutica total de mefloquina recomendada para los pacientes no inmunes es de 20 a 25 mg/kg. En el caso de los individuos parcialmente inmunes puede bastar una dosis total menor a 15 mg/kg. Por lo tanto, las personas no inmunes que pesen más de 45 kg deben recibir un total de 1250 - 1500 mg de mefloquina (5-6 comprimidos de Lariam), mientras que los pacientes parcialmente inmunes que pesen lo mismo, deben recibir 750 - 1000 mg (3-4 comprimidos de Lariam).
A los pacientes que vomitan en menos de 30 minutos después de ingerida la droga se les debe dar una segunda dosis completa. Si el vómito se produce 30 a 60 minutos después de una dosis, se debe dar otra media dosis. Después del tratamiento de la malaria P. vivax, se debe considerar una nueva profilaxis con un derivado de 8-aminoquinolina (por ejemplo, primaquina) para eliminar las formas hepáticas. Si un tratamiento completo con Lariam no produce ninguna mejora dentro de 48 a 72 horas, se debe considerar el uso de tratamientos alternativos. Cuando se presenta la malaria avanzada durante la profilaxis con Lariam, los médicos deben evaluar con minuciosidad que antipalúdico usar para la terapia. En lo que respecta al uso de halofantrina, remítase a contraindicaciones. Pautas posológicas especiales: Profilaxis:La dosis profiláctica recomendada de Lariam es de más o menos 5 mg/kg una vez a la semana. La primera dosis debe ingerirse por lo menos una semana antes de llegar a un área endémica. Si esto no es posible, se debe dar una dosis cargada. En los adultos que pesan más de 45 kg, esto corresponde a un comprimido semanal. En medicina, podría ser conveniente empezar cn la profilaxis 2 a 3 semanas antes de la partida, para asegurar que la combinación de drogas se tolera bien. Las dosis semanales se deben ingerir el mismo día de la semana. Para reducir el riesgo de malaria después de abandonar un área endémica, se debe continuar la profilaxis por 4 semanas más. 1. Adultos y niños que pesan más de 45 kg:En las personas que pesan más de 45 kg, la dosis profiláctica es de 250 mg de mefloquina (1 comprimido de Lariam) una vez a la semana. 2. Niños y adultos que pesan menos de 45 kg:La dosis semanal disminuye en proporción al peso corporal: >30 - 45 kg 3/4 comprimido; >20 - 30 kg 1/2 comprimido; hasta 20 kg 1/4 comprimido. La experiencia obtenida con Lariam en niños de menos de 2 años de edad o que pesan menos de 15 kg, es limitada, por lo que no se recomienda su uso. Cuando la profilaxis con Lariam falla, los médicos deben evaluar con minuciosidad cuál es el antipalúdico que debe usarse en la terapia. Tratamiento en caso de emergencia:Lariam se puede prescribir para usar como un medicamentos de reserva en caso que no se disponga de atención médica inmediata. El autotratamiento debe comenzar con una dosis aproximada de 15 mg/kg; por lo tanto, en el caso de los pacientes que pesan 45 kg o más, la dosis inicial sería de 3 comprimidos de Lariam. Si no fuera posible obtener atención médica pofesional dentro de 24 horas, y no se producen efectos colaterales graves; se debe tomar una segunda fracción de la dosis terapéutica total 6 a 8 horas más tarde (2 comprimidos en el caso de los pacientes que pesan 45 kg o más). Los pacientes que pesan más de 60 kg deben tomar un comprimido adicional de 6 a 8 horas después de la segunda dosis. Se debe aconsejar a los pacientes que consulten a un doctor en la primera oportunidad que tengan, incluso si sienten que se han recuperado por completo.
Contraindicaciones
El uso de Lariam está contraindicado en pacientes con hipersensibilidad conocida a la mefloquina o a compuestos químicamente relacionados (por ejemplo quinina, quinidina), o bien a cualquiera de los excipientes contenidos en la formulación. Lariam no debe prescribirse como profilaxis a personas con depresión activa o con antecedentes de trastornos psiquiátricos mayores o convulsiones.
Reacciones Adversas
En las dosis utilizadas contra el paludismo agudo, es posible que las reacciones adversas a Lariam no sean diferenciables de los síntomas de la propia enfermedad. Los efectos secundarios más frecuentes de la profilaxis con Lariam -náuseas, vómitos, mareos- suelen ser leves y pueden disminuir en el curso de la administración, aunque aumente la concentración plasmática del fármaco. En la quimioprofilaxis, el perfil de seguridad de la mefloquina se caracteriza por un predominio de las reacciones neuropsiquiátricas adversas (ver Advertencias). En el año 2009 se publicó una revisión sistemática que incluía un estudio aleatorizado de doble ciego en 976 pacientes (483 tratados con mefloquina y 493 con atovacuona-proguanil) en el que se produjeron efectos neuropsiquiátricos adversos relacionados con el tratamiento en 139/483 (28,8%) pacientes del grupo mefloquina frente a 69/493 (14%) del grupo atovacuona-proguanil (Tablas 1 y 2). En ningún grupo hubo acontecimientos adversos graves atribuibles a la medicación.
Los estudios in vitroe in vivono revelaron hemólisis asociada a deficiencia de G6PD. Ensayos clínicos: Alteraciones analíticas:Elevación transitoria de las transaminasas, leucocitopenia o leucocitosis, trombocitopenia. Experiencia tras la comercialización: Trastornos del metabolismo y la nutrición: Anorexia:nada frecuente. Trastornos psiquiátricos: Trastornos del sueño (insomnio, sueños anormales):muy frecuentes. Agitación, inquietud, ansiedad, depresión, cambios de humor, crisis de angustia, estado confusional, alucinaciones, agresividad, reacciones psicóticas o paranoides: nada frecuentes. En raras ocasiones se han notificado casos de ideación suicida, pero no se ha establecido ninguna relación con la administración del fármaco. Trastornos del sistema nervioso: Mareo, alteración del equilibrio, cefalea, somnolencia:muy frecuentes. Síncope, convulsiones, pérdida de memoria, neuropatías sensoriales y motoras (parestesias, temblor y ataxia):nada frecuentes. Se han notificado casos aislados de encefalopatía. Trastornos oculares:Deterioro visual:nada frecuente. Trastornos auditivos y laberínticos: Vértigo:muy frecuente. Trastornos vestibulares, incluidos acúfenos e hipoacusia:nada frecuentes. Trastornos cardíacos:Taquicardia, palpitaciones, bradicardia, frecuencia cardíaca irregular, extrasístoles, otros trastornos transitorios de la conducción cardíaca: nada frecuentes. Se han notificado casos aislados de bloqueo auriculoventricular. Trastornos vasculares: Trastornos circulatorios (hipotensión, hipertensión, rubefacción):nada frecuentes. Trastornos respiratorios, torácicos y mediastínicos: Disnea:nada frecuente. En muy raras ocasiones se ha notificado neumonía de posible origen alérgico. Trastornos gastrointestinales:Náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal: muy frecuentes. Dispepsia:nada frecuente. Trastornos de la piel y el tejido subcutáneo:Erupción, exantema, eritema, urticaria, prurito, alopecia, hiperhidrosis: nada frecuentes. Se han notificado casos aislados de eritema multiforme y síndrome de Stevens-Johnson. Trastornos musculoesqueléticos y del tejido conjuntivo:Debilidad muscular, calambres musculares, mialgia, artralgia: nada frecuentes. Trastornos generales y alteraciones en el lugar de administración:Edema, dolor torácico, astenia, malestar general, fatiga, escalofríos, pirexia: nada frecuentes. Trastornos hepatobiliares:Se han descrito trastornos hepáticos relacionados con la medicación, desde elevaciones asintomáticas y transitorias de las transaminasas hasta insuficiencia hepática. Trastornos de la sangre y del sistema linfático:Agranulocitosis, anemia aplásica.
Medicamentos Relacionados con LARIAM